jueves, 9 de enero de 2014

En soledad

   

 Pasan 3 minutos de la medianoche. Cada habitante de este planeta es un mundo, una historia y un cúmulo de experiencias diferentes. Cada vez que aprendo algo nuevo me quedo boquiabierto de tanta maravilla, de tanta complejidad y sencillez al mismo tiempo, de tanta sabiduría, del gran tesoro de la vida y de sus misterios, de cuántas creencias limitantes que nos impiden crecer y evolucionar.

     Algo está pasando, bueno siempre pasa algo, sin embargo, en este tiempo que nos ha tocado vivir todo se está acelerando. Un año de los de ahora no es como un año de los de antes, todo pasa más deprisa, todo vibra más rápido y se están cambiando muchas cosas aunque no exentas de cadenas y obstáculos que romper y superar.

     Nos hemos centrado en lo físico, hemos creído en lo bioquímico, hemos intuido que algo pasaba con lo emocional y ahora nos estamos dando cuenta que todo empieza en lo energético. Todo está interconectado y cuanto más sabemos y más aprendemos, más claro lo vemos en que lo complejo está en lo sencillo. Es importante la observación del exterior, sí pero aún más importante es la observación y conocimiento de nuestro interior.

     Cada vez más escuchamos hablar del poder de la mente, del poder de las palabras, del poder de los pensamientos y emociones aunque todavía hace falta CREERNOSLO. La verdadera terapia, la verdadera sanación está en las energías y, para el ser humano, la mayor energía está en la PALABRA que es la expresión de nuestros pensamientos.

     La palabra y el pensamiento son energías que empezamos a captar desde que estamos en el vientre de nuestra madre y desde ese mismo momento nos va moldeando, por eso es adecuado saber utilizar adecuadamente este gran poder para así poder mantener nuestra conexión con nuestro diseño original, con la misión que venimos a realizar a este plano de existencia y así poder vivir nuestra propia vida siendo los directores de nuestra película, y no vivir la vida que otros quieren que vivamos anulando la nuestra.

     La meditación es necesaria, es más, imprescindible para estar en silencio y dejar que nuestra intuición nos guíe. Estar solo es necesario en muchas ocasiones ya que esta soledad nos da respuestas.


     Son casi las 00.20 de la noche, un día más he vivido, un día más he disfrutado. Doy gracias por ello y cuido mi cuerpo para seguir disfrutando de este tiempo de cambios tan maravilloso que me ha tocado vivir. 

     Disfruten.

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